A mediados de marzo, el colectivo Madres Buscadoras de Jalisco, localizó los cuerpos de los amigos Hugo Garrido y Javier Gutiérrez, quienes desaparecieron el año pasado. De acuerdo con el padre de Javier, la localización de su hijo se dio gracias a que él soñó con la dirección exacta de su paradero.
Hugo y Javier fueron vistos por última vez el 11 de diciembre, en Jalisco. Los cuerpos estaban enterrados en el patio de una casa abandonada dentro del fraccionamiento Villa Fontana Aqua, en el municipio de Tlajomulco.
Guadalupe, padre de Javier, señaló que él había soñado con su hijo, quien le indicó dónde podrán localizarlos.
“Mi hijo me dijo que estaba en el baño de una casa y me dio un número y allí lo encontré”, dijo en entrevista.
Cuando Javier y Hugo fueron hallados, el progenitor de Javier mencionó que los jóvenes llegaron a Tlajomulco para dejar a unas amigas, pero jamás regresaron a casa. Presuntamente, los hombres fueron atacados por desconocidos cuando ocurrió esto.
“Yo diario le pedía a Dios y a la Virgen que me dijera. Un día se me manifestó mi hijo en un sueño y me dijo en el baño y el número de la casa y ahí fue donde lo encontré”, relató a la cadena.
Tras la localización de los amigos, la fiscalía estatal y las autoridades del municipio resguardaron el área para que los buscadores descartaran todas las posibles fosas, ya que consideraban que en el sitio podrían encontrar hasta veinte cuerpos en total.
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